Ir al contenido principal

Depresiones Navideñas

Durante las fiestas de fin de año, específicamente durante la época previa a la Navidad, es común escuchar expresiones como: “No me gusta la Navidad”, “La Navidad me deprime”, “Durante la época de Navidad siempre ando con una opresión en el pecho”. No me refiero sólo a pacientes en el consultorio sino también a las personas en la calle. Les propongo que cada uno de Uds. indague entre amigos a su alrededor. Verán que no todo es alegría y júbilo durante las fiestas de Diciembre. Un esbozo de melancolía, tristeza y hasta depresión también suele filtrarse.
Pensaba en estos temas cuando encontré una nota de la agencia United Press International (UPI) en la que se mencionaba que en Lima-Perú los casos de depresión y suicidios aumentan en un 40% durante las fiestas de fin de año. Estos datos fueron hechos públicos por una entidad vinculada a la salud mental y la nota correspondía al 4 de Diciembre de este año, aunque después encontré que esta nota era un refrito ya que hace un año, Radio Programas del Perú también la había publicado en su página web.

Se me ocurrió, entonces, buscar en Internet y coloqué las palabras “Navidad depresión suicidios” en Google. Después de sólo 0.24 segundos apareció la friolera de 207,000 artículos que contenían referencias a las tres palabras a la vez. Así me enteré que no sólo en Perú la gente se deprime en navidad, también en México preocupan los altos índices de suicidios en las épocas navideñas; en Puerto Rico instauran el 5 de Diciembre como el “Día de alerta para la prevención del suicidio en Navidad”; en Nueva York dos de cada tres suicidios entre Diciembre y Enero tenían que ver con las fiestas de fin de año; en España, Chile y Ecuador la situación es similar.
Este último me hizo pensar que mi consulta era parcial ya que al hacerla en castellano estaba invocando a noticias en su mayoría del mundo hispanohablante. Empecemos de nuevo. ¿Cómo se dice Navidad-suicidio-depresión en inglés? A ver… “Christmas suicide depression”… esta vez Google se demoró un poco: 0.34 segundos en seleccionarme ¡1’450,000 artículos! ¡Esto se estaba convirtiendo en una epidemia!
Con un poco más de detenimiento pude observar que las cosas no siempre eran igual en todo el mundo. En Canadá, por ejemplo, según el Centro para la Prevención del Suicidio, éstos no aumentan sino disminuyen. De hecho según un estudio realizado por ellos, Diciembre se encuentra recién en el 9no. lugar respecto a los demás meses del año, siendo en Agosto cuando ocurren la mayoría de suicidios. La razón, según los ordenados canadienses, podría deberse a que es durante las fiestas navideñas cuando se generan más redes naturales de protección emocional hacia la gente más vulnerable y deprimida ya que es la época en que se suelen reunir familiares y amigos, y se suelen establecer mejores recursos comunitarios que favorecen la unión de todos. Tiene sentido, pero… si es así, ¿por qué en muchos otros lugares pareciera ser al revés?

Revisando otros artículos veo uno del Los Angeles Times del 17 de Diciembre, que indica que luego de revisar cifras estadísticas de Estados Unidos y el resto del mundo, los expertos han determinado que en realidad los suicidios se reducen en 40% durante la época de Navidad, lo que convertiría aquello de que en Navidad la depresión y los suicidios aumentan, en un verdadero mito urbano. Aquí es donde no puedo evitar pensar que los limeños vamos siempre en sentido contrario al resto del mundo.
¿Cómo entonces podemos conciliar informaciones tan contradictorias? A lo mejor debemos sospechar que existen al menos dos experiencias: la del mundo hispanohablante (de aumento de depresión y suicidios) y la del resto (baja de los suicidios). La verdad es que hasta aquí llego y no voy a intentar solucionar esta contradicción. Con lo que sí me quedo es con la sensación que algo sucede durante esta época del año que logra movilizar sentimientos de nostalgia y tristezas profundas, además de los intencional­mente promocionados sentimientos de hermandad, solidaridad y amor entre los seres humanos.

¿Por qué cuando todos los medios nos bombardean con publicidad que llama al intercambio de regalos y gratitudes como expresión del amor y la unión de la familia, la sensación de vacío aumenta? Intentaré una breve reflexión en torno a esto:
  • En primer lugar recordemos que se trata no sólo de la Navidad sino del final del año. Cada final de año es el fin de un ciclo de vida en el que podemos estar sintiendo frustración o alegría por las metas alcanzadas o perdidas. En cada final de algo, las promesas no cumplidas o las aspiraciones frustradas en nuestro entorno, pueden motivar esta sensación de vacío que se traduce en nostalgia, tristeza o depresión. A esto hay que sumar las experiencias de cada uno durante la vida, es decir, que a más fines de año vividos así, la experiencia se puede agudizar. En resumen, cada fin de año se nos remueven emociones de todos los finales experimentados (fin del colegio, fin de una relación, familiares fallecidos, etc.).
  • Los factores psicosociales: la presión por un esquema de celebración que obedece más a criterios económico-comerciales que a la solidaridad real es muy fuerte para muchas personas y un motivo para sentirse más frustrado ante las expectativas de unión real y el interés generalizado por lo superficial, es decir, por el prometido regalo. Y aquí no sólo me refiero a hogares de recursos limitados.
  • Desde un punto de vista netamente psicológico no podemos olvidar a nuestra vieja amiga la neurosis que siempre se empeña en impedirnos el disfrute pleno de cada experiencia positiva.

Para finalizar esta breve reflexión navideña me gustaría que nos quedemos con las sugerencias de los positivos canadienses, quienes piensan que más bien debemos aprovechar esta época del año para generar de manera natural más redes de protección hacia la gente más vulnerable emocionalmente porque (1) es una época que facilita el re-encuentro con amigos y familiares, (2) podemos evocar sentimientos positivos y de esperanza, con una mirada renovada hacia el prójimo, y (3) casi sin darnos cuenta podemos estar construyendo mejores recursos comunitarios para la ayuda y el sostén emocional. Ojalá que cada uno pueda realizar un pequeño esfuerzo en este sentido.

A todos Uds. amigos y lectores les deseo de todo corazón una muy feliz Navidad.

(Publicado en ESTAMPA, suplemento dominical del Diario Expreso, Lima-Perú, el día 23-Dic-2007)

Comentarios

Entradas populares de este blog

El amor (de pareja) en los tiempos…

Quiero usar de “pre-texto” este extraordinario texto extraído del libro “El amor en tiempos del cólera” de Gabriel García Márquez (1985) para que podamos ser testigos, guiados por su deliciosa pluma, de muchos de los aspectos que rodean la naturaleza de los conflictos de pareja. Tenía razón el viejo Freud cuando a principios del Siglo XX afirmaba que la ciencia llega siempre tarde a lo que poetas y filósofos ya conocían desde antes. Les ubico en la escena: los personajes que intervienen son el doctor Juvenal Urbino y su esposa Fermina Daza, ambos de familias muy respetadas, y cuyo matrimonio llegó a celebrar sus bodas de oro. ¡Cincuenta años juntos! Las fantasías más privadas quedaron atrás y ya con muy pocas posibilidades de realizarse en la vida. Ella, Doña Fermina, se casó por decencia y él por amor. La viñeta que leeremos sucedió cuando andaban por los 30 años de matrimonio. Me gustaría que pongan especial atención a los comentarios del narrador tanto como a los hechos en sí. Les s

TALLER PARA MEJORAR LA VIDA EN PAREJA

Introducción ¿Cuáles son las cosas que ponen en peligro realmente a las relaciones de pareja? ¿Son las grandes catástrofes matrimoniales o las minúsculas miserias de cada día ? Estudios recientes indican que las pequeñas cosas cotidianas ponen mucho más en riesgo la existencia de la vida en pareja que los grandes problemas. Cuántas veces hemos escuchado cosas como: mi pareja nunca habla, deja toda la ropa tirada, siempre me interrumpe cuando estoy viendo mi fútbol, no ayuda para nada con la limpieza de la casa, no se preocupa por ahorrar, prometió que siempre me iba a cuidar, etc., etc., ... Son estas vivencias del diario las que van minando el interés y pueden acabar por destruirla. Adicionalmente, casi todas las parejas aceptan que las discusiones se inician por verdaderas tonterías. Y, aunque por fuera son una serie de nimiedades diferentes cada día, por dentro casi siempre vamos encontrando los mismos fantasmas rondando en cada una de ellas, repitiéndose y repitiéndose más allá d

¿Narciso yo?

A través del correo he recibido esta semana tres consultas referidas al tema del “amor narcisista” que tocamos tangencialmente la semana pasada. En atención a ellos me parece un buen momento para ampliar algo de lo que allí mencioné a manera de contestación a su deferencia al compartir conmigo sus propias experiencias. ¿Qué es esto del Narcisismo? Narciso es el personaje recogido por el poeta romano Ovidio cuya historia es contada en su obra Las Metamorfosis (libro tercero) y que narra la historia de un joven muy hermoso que andaba triste porque no podía enamorarse al no encontrar alguien de suficiente belleza. Una noche de luna llena, al acercarse a una fuente, logró ver su propia imagen reflejada en el agua. No consciente de que se trataba de él mismo, se enamoró perdidamente del rostro que lograba ver en ella, visitándola noche tras noche. Notaba que el personaje de sus amores se comportaba exactamente como él e incluso se retiraba en el momento en que él mismo debía hacerlo. Una no